viernes, 18 de octubre de 2013

LA EXTRADICIÓN DE SÁNCHEZ LOZADA


18-10-13
N. No. 263
LA EXTRADICIÓN DE SÁNCHEZ LOZADA
Estamos escuchando con mucha frecuencia, una serie de alegatos culpando al Gobierno, al poder judicial, a la Cancillería y en fin a todo el mundo en Bolivia, por el hecho de no haber podido, hasta la fecha conseguir la extradición de Gonzalo Sánchez Lozada de los Estados Unidos a fin de que pueda saldar cuentas con la justicia boliviana, en torno a la sangrienta masacre ordenada en los meses de septiembre y octubre de 2003.
La mayor parte de las críticas vienen, cuándo no, de la derecha reaccionaria que precisamente colaboró con el ex-presidente en el curso de sus dos mandatos presidenciales. Con el mayor cinismo, esta clase de gente, ha hecho de ese problema uno más para atacar sin descanso al Gobierno.
Y no se trata ahora de defender el accionar del Gobierno y la Cancillería para obtener aquella extradición. De lo que se trata es de considerar como se debe tratar el fondo del asunto.
Gonzalo Sánchez Lozada, es un boliviano con doble nacionalidad, pues ha adquirido por nacionalización la ciudadanía norteamericana, engañando a la población boliviana al hacerse elegir presidente teniendo el impedimento de la doble nacionalidad.
Después de los sucesos de octubre y su vergonzosa huída en medio del odio popular, consiguió inmediatamente refugio en una de sus “patrias” que le concedió el mismo en forma inmediata.
Ahora bien, ni Dios y su ayuda, ni la del Diablo, podríamos conseguir que los Estados Unidos entregue a Bolivia a uno de sus súbditos, a uno de sus agentes, a uno de los servidores incondicionales. De modo que todas las majaderías en torno al supuesto “fracaso” del Gobierno no tienen el menor asidero.
Todos quienes conocemos el corazón y el alma del imperialismo sabemos que ese país es actualmente el refugio de cuanto criminal y genocida huye de su patria perseguido por sus pueblos, pero muy seguramente resguardado por sus amos que agradecen de este modo los servicios prestados. Allá en los “ESTAYTES” pululan los Marcos genocida filipino, los Berzain asesino boliviano, Cedras, el genocida haitiano, etc., etc. Un ejemplo paradigmático es el del terrorista confeso Posada Carriles, el criminal confeso que voló en pedazos una avión de Cubana de Aviación y recibió refugio privilegiado, después de huir de una cárcel venezolana y ser liberado por la presidenta panameña Mireya Moscoso.
Por todo lo dicho, todos los insinceros reproches al Gobierno sobre un supuesto “fracaso” caen por su base y mejor harían los críticos desorientados de dirigir sus ataques al único culpable de la impunidad del genocida Sánchez Lozada: el Imperialismo Norteamericano.

PCmlm

No hay comentarios:

Publicar un comentario